Descripción del problema
La ausencia de abejas para asistir en la polinización de vegetales y árboles frutales en Canarias es un problema que causa pérdidas en producción y, en ocasiones, aumenta costes. La falta de polinización en frutas y verduras puede resultar en una deformidad de los frutos y un descenso del rendimiento de las cosechas según varios estudios, ya que se estima que el 90% de las plantas con flor reciben ayuda de algún animal polinizador. Con polinizadores como las abejas, grandes cultivos de canarias como el aguacate, la naranja y el mango incrementan sus frutos por árbol entre un 21 y 96%, un 26% y un 35% respectivamente. Adicionalmente, cultivos como el tomate se benefician de la polinización en forma de un aumento de la calidad y tamaño de la fruta producida según un estudio del Departamento de Ciencias Químico-Biológicas de la Universidad de las Américas Puebla. La calabaza también requiere de polinización para dar fruto. Con la relativa desaparición de las abejas, muchas huertas y empresas han recurrido a la polinización manual, que es menos efectiva que la polinización natural cuando es realizada incorrectamente. Tener que delegar un factor de producción a una tarea laboriosa que podría ser automatizada de forma ecológica y eficiente supone un incremento de costes en forma de salarios respecto al trabajo realizado y una disminución de la eficiencia de la operación como conjunto, además de disminuir la calidad en términos de tamaño, color y sabor de los cultivos, en ciertos casos. En ausencia de dicha polinización, algunos podrían recurrir a fertilizantes y estimulantes de crecimiento, lo que incrementaría la contaminación del suelo. En esta situación económica, la apicultura presenta una gran cantidad de subvenciones y la reducción de impuestos en la renta per cápita, lo que la convierte en una gran oportunidad de negocio.
Propuesta de solución
La solución a este problema resulta clara, la implementación de colmenas en huertos particulares y de distribución. Nuestra propuesta de negocio es crear una empresa llamada ¡Polinízate! que tendrá como objetivo crear y mantener colmenas para que los empresarios y agricultores se beneficien de la polinización. La idea principal es construir un número de colmenas en los cultivos del cliente, dependiendo del número de hectáreas a polinizar, y hacer el mantenimiento que requieran dichas colmenas para asegurar que son colmenas estables, productivas, y beneficiosas para el medio ambiente.
Aún comprando al pormenor, las colmenas artificiales cuestan entre 20 y 130 euros dependiendo del tamaño, y las abejas que se piensan utilizar, la Abeja Negra Canaria, no cuesta más de 25€ por reina.Esta instalación y mantenimiento de las colmenas serían realizadas por apicultores empleados por la empresa que irían periódicamente a la huerta cliente para certificar su correcto funcionamiento. El precio por estos servicios dependerá del número de hectáreas a polinizar y el tipo de cultivo, ya que distintas plantas tienen diferentes dificultades para ser polinizadas y tienen distintos beneficios o detrimentos para la colmena. La instalación de las colmenas serían remuneradas en forma de capital, el mantenimiento de las colonias podría ser pagado de dos formas, pagando completamente con dinero, o con un descuento sustancial si se cede la miel y cera producida a nuestra empresa. Los productos apícolas adquiridos serían entonces vendidos por nuestra empresa a la cooperativa apícola correspondiente a la isla en la que esté la huerta. Además, esta empresa podrá asociarse con ecoalpispas, una empresa canaria que utiliza la cera de las colmenas de abejas para crear papel biodegradable para envoltorios, esta asociación beneficiará el movimiento económico insular y la eliminación de residuos, formando un círculo de reutilización y reciclaje. Esta iniciativa representa una propuesta innovadora y poco desarrollada en la actualidad, ofreciendo una solución eficiente y ecológica a la crisis de la polinización en el sector agrícola.